El ojo de gato o “chatoyancy” es un efecto óptico que puede aparecer en varias especies de minerales. Se trata de un reflejo vertical causado por inclusiones fibrosas paralelas. Suele aparecer en variedades de cuarzo, en crisoberilos, en berilos, en turmalinas, en apatitos, en granates y en danburitas.
El ojo de gato se considera una piedra de protección y limpieza. Suele usarse en el 6º chakra para potenciar la intuición y para meditar. Favorece la confianza en uno mismo y la serenidad. Se dice que ayuda a sanar desórdenes oculares.