La pietersita es una variedad de calcedonia que contiene fibras incrustadas de amfiboles (metasilicato de calcio, magnesio y hierro) con diferentes grados de alteración. Estas fibras son las que le dan el brillo y los reflejos que se observan en su superficie.
La pietersita puede ser de tonos azules, gris, marrón, rojizos, dorados y amarillentos. Debe su nombre a Si Pieters, comerciante de minerales que la descubrió en Namibia en 1962.
Yacimientos: China y Namibia.
La pietersita se considera una piedra de visión. Potencia el tercer ojo y la glándula pineal, estimulando la intuición. Favorece el estado meditativo y el equilibrio espiritual. La pietersita fortalece la voluntad personal y ayuda a encontrar y expresar la verdad interna, más allá de los condicionamientos externos e internos. A nivel curativo se dice que ayuda a equilibrar el sistema endocrino.