La atacamita es un cloruro de cobre hidróxido, un mineral secundario del cobre formado a través de la oxidación de otros minerales de cobre, especialmente en condiciones áridas. Puede alterar a malaquita y crisocola, creando pseudomorfos. La atacamita forma cristales prismáticos, tabulares o pseudoctaédricos. También se encuentra en forma de rosetas radiales o agregados cristalinos, granulares, masivos y fibrosos.
El nombre de atacamita hace referencia al desierto de Atacama, en Chile, donde se han encontrado cristales de atacamita de hasta 2,5 cm de longitud.
Yacimientos: Chile (Atacama), México, Estados Unidos, Australia, Reino Unido, Rusia, España, Italia, Sudáfrica, Perú, Austria, Argentina, Bolivia, Canadá, China, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, India y Japón.
La atacamita es una piedra relacionada con el amor incondicional y la sanación. Se dice que ayuda a abrir el tercer ojo, favoreciendo la conexión espiritual y la visualización. Es una piedra calmante y sanadora, con lo que suele usarse en situaciones de estrés o tensión. También se usa para la limpieza energética del cuerpo. A nivel curativo se dice que la atacamita favorece el timo y el sistema inmunitario.