La zoisita es un aluminosilicato de calcio hidróxido que pertenece al grupo de la epidota. Los cristales de zoisita son prismáticos pero también puede encontrarse en forma masiva. El color más conocido de la zoisita es el verde pero también puede amarillo, marrón, gris, azul, rosa o blanco.
La variedad rosa se llama thulita y la variedad azul se llama tanzanita. Las dos son conocidas por su belleza. La zoisita aparece en rocas metamórficas, en vetas de cuarzo y en pegmatitas.
La zoisita lleva el nombre de un coleccionista austriaco llamado Sigmund Zois. Originalmente se llamaba saualpite y se encontró por primera vez en las montañas de Su-Alp, en Austria, en 1805.
Yacimientos: India, Madagascar, Tanzania, Rusia, Sri Lanka, Kenya, Camboya, Austria y Japón.
La zoisita se considera una piedra de transmutación y creatividad. Ayuda a la expresión del propio yo y a la consecución de los objetivos. La zoisita favorece el desapego y la confianza en uno mismo. A nivel físico se dice que fortalece el sistema inmunitario y ayuda a sanar las afecciones pulmonares y resfriados.