El ópalo de fuego es una variedad de ópalo de color naranja rojizo. Su color se debe a la presencia de óxidos de hierro. El ópalo es un mineraloide constituido por gel de sílice endurecido. Contiene entre un 5 y un 10 por ciento de agua y su estructura suele ser compacta y amorfa.
El ópalo se caracteriza por su efecto reflector, debido al enrejado de las partículas microscópicas que lo componen, a través de las cuales pasa la luz mostrando destellos de colores. El ópalo que presenta juegos de colores se llama ópalo noble, y es muy valorado para la elaboración de la joyería.
El ópalo se encuentra en cavidades de rocas volcánicas, en depósitos de fuentes termales y en acumulaciones. También suele encontrarse en forma de madera fosilizada.
Yacimientos: Australia, Etiopía, México, Estados Unidos, Perú, Canadá y Eslovaquia.
El ópalo de fuego se considera una piedra de poder personal. Potencia el fuego interno y amplifica la energía. Ayuda a soltar el pasado y proporciona protección en situaciones peligrosas. El ópalo de fuego ayuda en los negocios y favorece los cambios y el progreso. Activa la creatividad y la espontaneidad. A nivel curativo suele usarse para aliviar el síndrome premenstrual.