El cuarzo ahumado es una variedad de cuarzo de tonos marrón, gris y negro. Cuando el color es negro y opaco se llama cuarzo morión. El color se debe a la radiación natural en su proceso de formación. También hay cuarzos ahumados que han sido irradiados o calentados para potenciar su color. El cuarzo ahumado es más abundante que el cuarzo citrino o la amatista y se encuentra en casi todo el mundo. Forma cristales prismáticos visibles y suele encontrarse en pegmatitas, en filones hidrotermales y en grietas alpinas.
Yacimientos: Estados Unidos, Canadá, China, Australia, Austria, Brasil, Sri Lanka, España, Escocia, Finlandia, Alemania, Italia, Madagascar, Noruega, Suiza, Rusia e Inglaterra.
El cuarzo ahumado es un mineral que suele usarse para canalizar y arraigar la luz del universo en el plano físico. Está asociado con el 1r chakra y ayuda a asimilar lo que nos es vital y también a desprendernos de lo que sobra. Ayuda a disolver las energías densas, promueve el pensamiento positivo y aporta calma emocional. El cuarzo ahumado potencia la fuerza necesaria para realizar y llevar a cabo los propósitos. Suele utilizarse para integrar la información después de un trabajo meditativo. Físicamente el cuarzo ahumado puede ayudar a disolver los calambres y a regular los líquidos corporales.