La cerusita es un carbonato de plomo, la mena de plomo más abundante después de la galena. Su nombre proviene del latín "cerussa" (plomo blanco). En general suele ser blanca o incolora, pero puede variar de color en función de las inclusiones que contenga.
Los cristales de cerusita suelen ser prismáticos, isométricos y tabulares. A menudo forman maclas, pero también puede ser compacta. Aparece en las zonas de oxidación de yacimientos de plomo. Cuando aparece junto con la galena también se la llama "plomo negro".
Yacimientos: Namibia, Australia, Italia, Bolivia, España, Estados Unidos, Escocia y Marruecos.
La cerusita se considera una piedra de crecimiento personal. Es beneficiosa para la adaptación a los cambios, para la responsabilidad, la comunicación y la toma de decisiones. A nivel curativo se dice que ayuda a vitalizar el cuerpo y a reforzar los huesos y tejidos. La cerusita se recomienda en caso de insomnio y para equilibrar el sistema nervioso.