La piedra sol es una variedad de oligoclasa de calidad gema, un feldespato plagioplástico abundante. Debe su color y brillo a las inclusiones de hematites o de goethita dispuestas en paralelo. A veces puede contener cobre en lugar de hematite, como en el caso de la piedra sol de Oregón.
La piedra sol suele formarse en pegmatitas graníticas, en granito y en rocas ígneas félsicas. También en rocas metamórficas, formándose en esquistos y gneis. Normalmente se encuentra en hábito masivo, granular y más raramente en forma de cristales tabulares.
Yacimientos: Estados unidos, Noruega, Rusia, Canadá, India y Australia.
La piedra sol representa la vibración regeneradora de la luz solar. Corresponde al 3º chakra y suele usarse para sanar la zona del plexo solar. Es una piedra indicada para cortar enganches mentales y emocionales o también vínculos insanos, con el fin de potenciar la independencia, la autoestima y la fortaleza personal.
La piedra sol estimula la vitalidad, el entusiasmo, el buen humor y la alegría. Fomenta un enfoque optimista de la vida y de uno mismo. Se considera una piedra nutridora y de limpieza.